Estudia la infinidad de opciones
Verticales, en azoteas, balcones, patios, terrazas, en interiores, exteriores… El no tener espacio ya no es excusa. Los sitios “cerrados” tampoco y el hecho de vivir en ciudades puede convertirse en una oportunidad de cambio, como hemos comentado en post anteriores.
Disponer de plantas y zonas verdes en las cubiertas de los edificios ayuda a combatir la contaminación urbana. Según la empresa de sistemas integrales para la construcción sostenible Danosa, la presencia de plantas en una zona ajardinada en lo más alto del edificio puede ser una ayuda para reducir hasta el 50% del dióxido de carbono que se emite a la atmósfera. Las plantas ayudan a aislar el edificio y, por tanto, mantener los espacios más frescos en verano, el llamado “Efecto toldo” y a aislar del frío en invierno, permitiendo así un ahorro de energía en climatización del 30%. ( Ver artículo relacionado).
La sostenibilidad es un tema candente en el sector hostelero y lo seguirá siendo más a cada paso. Los clientes buscan soluciones más respetuosas con el medio ambiente.
Además de los productos frescos y locales en hoteles y restaurantes, los materiales y diseños naturales cobran cada vez más importancia entre arquitectos e interioristas, los cuales buscan disminuir barreras vegetales entre espacios interiores y exteriores. Los huéspedes buscan conectar con la naturaleza desde la seguridad de un espacio
interior.
Realizar un jardín es una de las prácticas sostenibles hoteleras en creciente auge: Permiten a los huéspedes tener un lugar para relajarse y disfrutar de las vistas, pero también reconectar con la naturaleza y aprender sobre los diferentes tipos árboles y flores de la zona.
Es una iniciativa que tiene un impacto positivo directo en el
medioambiente, en el clima y en la rentabilidad del establecimiento.
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